La guerra es guerra, lo demás es retórica




Armando Acosta  (06-25-2003)

En cualquier pais del mundo la mayoría son civiles, gente simple, personas cuyas vidas giran alrededor del reducido entorno de sus familias. Asi ha sido siempre a lo largo de la historia, y asi sigue siendo en nuestros dias.

La persona simple se sienta delante del televisor para ver una pelicula de época. La masacre de Judea... ¿Se imagina salir a la calle y encontrarse un ejército de soldados a caballo armados de espadas de hierro y lanzas de madera con puntas metálicas, matando todo lo que encuentran, degollando, incendiando, destruyendo? - Ese horror que ahora nos entretiene, fue trauma en las vidas de mucha gente simple a lo largo de toda la historia.

Los civiles de hoy también ven los noticieros ¿Cual es la diferencia? - La misma pantalla, los mismos colores, el mismo sufrimiento traducido en colores a través de la misma pantalla.

¿Se imagina escuhar la cierena de alarma aerea, el zumbido de los misiles, el estruendo infernal de las explosiones... una, diez, cientos de veces? Salir a la calle y ver que la ciudad se cae a pedazos, y con ella mucha gente simple, usted pudiera ser el próximo en morir achicharrado.

Del otro lado del mundo, gente simple como usted contempla la misma escena, pero en una pantalla donde no cabe toda la dimensión de la trajedia. Comen rositas de maiz con coca-cola y comentan: "Tremenda paliza que le estamos dando al tirano. Esta vez sí que vamos a liberar a esa pobre gente".


                                                

Miami / USAmail@armandoacosta.comInicio