Arboles


Grabado en La Habana, Cuba, entre enero y febrero de 1987.


  1. Esta noche
  2. Si tengo un hermano
  3. Mujer poetisa
  4. Negrito bonito
  5. Con un poco de amor
  6. Ohé nené
  7. Boricua en la luna
  8. Árboles

Esta noche

(Roy Brown)

Esta noche
tuve que salir y correr
sentir el viento y sudar
cual puma a la roca
cual mariposa
atento al camión
a la curva que esboza a su filo
vida de mil maromas
tiempo de guerra
estos mis días
¿Vendrá al final una explosión?

Comercial Ciudad
barriga del mundo
El Líbano explota
aquí la banca eructa
Haití de sangre aguada
Guatemala gime
Namibia estruja
y Chile se alza
y aquí estoy corriendo mi ruta
garganta cual gruta que brota cantari.


Si tengo un hermano

(Silvio Rodríguez)

Si tengo un hermano
hermano de suerte
hermano de vida
de historia y de muertes
no mido sus años
su poca fortuna
no mido su tacha
ni mido su altura.

Si tengo un hermano

Si tengo un hermano
hermano que arde
hermano mestizo
hermano de hambre
empapo mis himnos
con luz de su aire
tiño mi bandera
también de su sangre

Si tengo un hermano

Si tengo un hermano
hermano de sueños
hermano de bala
hermano de empeños
le entrego mis libros
le entrego mis manos
sin un humillante
recibo de pagos

Si tengo un hermano.


Mujer poetisa

(Letra: Roy Brown - Música: Natasha Drootin y Carl Royce)

Es tu forma de ser
tu forma de decir
la brisa cual ola
penetra la espuma
tu palabra sonrisa
emana de ti mujer
mujer poetisa.

Vi primero tu pelo
tu cuerpo castaño camina
farol al encuentro
adoquín de esquina
en la plaza San José
tus ojos que brillan
cercano al momento
y tú caminas sin prisa
mujer poetisa.


Negrito bonito

(Roy Brown)

El negrito bonito
se va pa' San Juan
buscando trabajo
buscando mas pan
no sabe en serio
que va a hacer
pero esto si sabe
no va a volver:
a picar la caña
en la llamarada
luchando con nada
sin saber porque.

Acaba el Relincho
buscando a Jacinto
encuentra al compai
tirado en la calle
y hablando de cosas
que no se pueden ver
diciendo entre baba:
no voy a volver
a picar la caña
en la llamarada
luchando con nada
sin saber porque.

El negrito bonito
no encuentra trabajo
esta atolondrao
se siente muy bajo
un tipo muy listo
le dice al bonito
que allá en Nueva Yol
todo es mejor:
no se pica caña
no hay llamarada
no se lucha por nada
sin saber porque.

El negrito bonito
no encuentra abrigo
se siente acosado
se muere de frío
allá en Nueva Yol
donde todo es mejor
se sienta gimiendo:
me estoy perdiendo
aunque no se pica caña
no hay llamarada
no se lucha con nada
sin saber porque

Acaba en Relincho
en negrito bonito
buscando al compai
tirado en la calle
y hablando de cosas
que no se pueden ver
diciendo entre babas:
no voy a volver
a picar la caña
en la llamarada
luchando con nada
sin saber porque.


Con un poco de amor

Con un poco de amor sobrevivo,
sobrevivo pecado, castigo.
Con un poco de amor yo me salvo,
sólo un poco de amor y soy algo.

Con un poco de amor tanto me enriquecí
que gastaba y siempre quedaba mi poco de amor.

Con un poco de amor me levanto
a mi diario de sed y de espanto.
Con un poco de amor yo progreso
canto himnos, me odian, voy preso.

Con un poco de amor tanto me enriquecí
que gastaba y siempre quedaba…

Con un poco de amor fue tejida mi piel
y el cincel de mis huesos fue un poco de amor.
Con un poco de amor soy yo mismo,
soy tú, soy aquel.

Con un poco de amor deberé continuar
a pesar de que sumo mil pocos de amor
Con un poco de amor
trabajando por un poco más.

Con un poco de amor sobrevivo
sobrevivo pecado, castigo.
Con un poco de amor yo me salvo,
sólo un poco de amor y soy algo.

Con un poco de amor tanto me enriquecí
que gastaba y siempre quedaba mi poco de amor.

(Silvio Rodríguez)


Ohé nené

(Letra: Luis Pales - Música: Roy Brown)

Ohé nené
Ohé nené
Adombe ganga mondé
Adombe
Candombe del baquiné
Candombe.

Vendlo aquí dormido
ju jú
todo esta dormido
ju jú
¿Quien lo habrá dormido?
ju jú
Babilongo ha sido
ju jú
Ya no tiene oído
ju jú
Ya no tiene oído.

Pero que ahora vera la playa.
Pero que ahora vera el palmar.
Pero que ahora ante el fuego grande.
con Tembandumba podra bailar.

Y a la Ginea su zombi vuela
-Coquí, cocó, cucú, cacá.

Bombó el gran mongo bajo la selva
su tierno paso conducirá.

Ni sombra blanca sobre la hierba
ni brujo negro lo estorbara.

Bombó el gran mongo bajo la selva
su tierno paso conducirá

Contra el hechizo de mala hembra
cocomacaco duro tendrá.

Bombó el gran mongo bajo la selva
su tierno paso conducirá
-Coquí, cocó, cucú, cacá.
Ohé nené


Boricua en la luna

Desde las ondas del mar
que son besos a su orilla,
una mujer de Aguadilla
vino a New York a cantar.
Pero no, solo a llorar
un largo llanto y morir.
De ese llanto yo nací
como la lluvia una fiera.
Y vivo en larga espera
de cobrar lo que perdí.

Por un cielo que se hacía
mas feo mas más volaba
a Nueva York se acercaba
un peón de Las Marías
Con la esperanza, decía,
de un largo día volver.
Pero antes me hizo nacer
Y de tanto trabajar
se quedo sin regresar:
reventó en un taller.

De una lagrima soy hijo
y soy hijo del sudor
y fue mi abuelo el amor
único en mi regocijo
del recuerdo siempre fijo
en aquel cristal del llanto
como quimera en el canto
de un Puerto Rico de ensueño
y yo soy Puertorriqueño,
sin na, pero sin quebranto.

Y el "echón" que me desmienta
que se ande muy derecho
no sea en lo mas estrecho
de un zaguán pague la afrenta.
Pues según alguien me cuenta:
dicen que la luna es una
sea del mar o sea montuna.
Y así le grito al villano:
yo sería borincano
aunque naciera en la luna.

 

(Letra: Juan Antonio Corretjer - Música: Roy Brown)


Árboles

(Letra: Clemente Soto - Música: Roy Brown)

Esos árboles
que no se llenan los bolsillos
de aguaceros
que no solo viven
de verdes pensamientos
amarillos
sino que les sacan puntas a las hojas
para adelantarse al rumbo
venidero de sus frutos.
Esos árboles
que aprenden con la lluvia
a no mojarse los pies
aun cuando el agua les suba
a la cintura.

Estos árboles
se comunican con la doncella que esta
con dolores para que multiplique
el número de su amante por si misma
para que pueda decir
amado multiplicate dentro de mi
para que cuando la emoción se acerque
a su cuadrado
su imaginación cautive
la palabra con labios.
Estos árboles
le dan albergue a la opinión
desamparada que tan elocuentemente
cultiva la anonimia
donde la madera verde de la lluvia
le brota en llamaradas
por los dedos.

Aquellos árboles
producen la tela incombustible
de su fuego con la nieve
imposible del verano
con lo que sucede
en la noche de abril
de cualquier mes de mayo
para que lo imposible escale
en el gozo de su desaventura
la cima infranqueable
de lo que la claridad no deja ver.
Aquellos árboles
ponen a madurar su ir en su venir
aprendiendo a salir en su llegar.


Comentarios: Héctor Velarde

[ Silvio Rodríguez ]

Última revisión: 24-11-96