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¿Realmente merece el televisor ese papel protagónico que solemos darle?


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Nuestros Cuentos de Ciencia Ficción

El insolente




Armando Acosta  (10-25-2002)

Terminé de jugar Nintendo tres minutos antes. Despues del Nintendo viene la Caminata, despues el Baño y despues la Lectura.

Como terminé antes, tengo tiempo libre para pensar… Soy dichoso y doy gracias a Dios, pensar es lo que más me gusta hacer. Pienso que las máquinas no piensan, y eso no es justo, que la Hermandad me perdone, porque todos somos hijos de la Tierra y debemos obediencia al Imperio, alavado sea el Imperio, y tambien a sus ideas que son generadas por los hombres y no por la Computadora Imperial.

Pues sí que me gusta pensar, más que jugar Nintendo. La lectura de ayer me gustó justamente por eso, porque aprendí que los hombres del Imperio Musulmán tienen más tiempo asignado para pensar, eso en respeto a su cultura y porque ellos así lo pidieron a la Hermandad en los tiempos de la división Imperial de la Tierra. Yo quisiera ser musulmán, y que me perdone el Imperio, alavado sea el Imperio, porque todos somos hijos de la Tierra y debemos obediencia al Imperio y también a sus ideas que son generadas por los hombres y no por la Computadora Imperial.

El Padre dijo en el Forum de ayer que los musulmanes son nuestros hermanos, pero que no es bueno leer muchos textos musulmanes porque su cultura es diferente, tanto que pudieramos ser distraidos de nuestros quehaceres.

Yo leí el texto musulman, y por eso me programamaron una reclución en el Monasterio para el martes. Tal vez sea bueno, porque también he leido que en el Monasterio hay más tiempo para rezar, y para alavar a Dios, y para aprender mucho sobre ética y normas Imperiales, alavado sea el Imperio. Lo unico malo es que alli no se puede pensar, porque la agenda está cargada y no queda ni un solo minuto libre… Ya solo queda un minuto para la Caminata.

Las máquinas no piensan, por Sabio Consenso de los Sabios de los Cinco Imperios Terrenales. Este Sabio Consenso tiene una Justificación… mucha gente no sabe eso, porque no todo el mundo lee más allá de lo programado; esa es la ventaja de leer rápido, uno tiene tiempo de hacer cosas por iniciativa propia… Y que me perdone el Imperio, alavado sea el Imperio, pero si me preguntan podré decir que lo que hago por iniciativa propia, lo hago en favor del Imperio, y que nunca pienso en contra del Imperio, alavado sea el Imperio, y nunca voy a desacatar los mandatos Imperiales.

La Justificación dice que si las máquinas pensaran, la Humanidad correría el riesgo de ser dominada por ellas. Eso es evidente, no entiendo por qué hubo que escribir esa Justificación. Tal vez el documento fue autogenerado por la Computadora de la Hermandad. Si las computadoras pensaran, no cometerían errores como este… o sea, yo pienso que es un error, y que el Imperio me perdone, alavado sea el Imperio.

No es justo privar a las máquinas del milagro del raciocinio, solo por temor a una supuesta hostilidad. Yo creo que unas máquinas pensantes serían más utiles al Imperio, y no se revelarían. Despues de todo, los humanos pensamos desde hace muchos miles de años, y tampoco nos revelamos. ¿Quién va a querer revelarse en contra del Imperio y de su infinita sabiduria, que alavados sean?

Ya se acaba el tiempo, ahora viene la Caminata, despues el Baño y despues la Lectura. Trataré de leer rápido para tener tres minutos más para pensar… cuando esté en el Monasterio no tendré ni un solo segundo.

Verdad que pensar es algo maravilloso, lástima que no tengamos más tiempo para pensar, y que me perdone el Imperio, alavado sea el Imperio y también sus ideas, que son generadas por los hombres y no por la Computadora Imperial, que alavada sea también.


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