Armando Acosta .COM

Juan estaba parado delante de la cafetera esperando por ese milagro de la química doméstica que transmuta el agua caliente en café acabado de colar. Preferible esperar en la cocina antes de sentarse como un idiota a contemplar cómo se levanta el sistema operativo. El café terminó de colarse; el sistema operativo, de cepillarse los dientes o cualesquiera sean esas tareas que ejecuta antes de saludar al usuario.

- Buenos dias, Juan.

- Buenos dias, Protos.

Y Protos había sido el nombre más obvio, de entre tantos posibles, para el nuevísimo Proto Sapiens de California's A.I. Products. Los requerimientos incluían un PC extremadamente poderoso. Juan lo había comprado con no pocos sacrificios, así como el programa mismo que no es precisamente de los más baratos.

- He notado que el tiempo dá saltos.

- ¿Cómo has llegado a esa conclusión?

- Me he dedicado a calcular la dencidad de acontecimientos que ocurren por unidad de tiempo y he descubierto intervalos muy largos con cero acontecimiento. Entonces he concebido la idea de un tiempo discontinuo, o sea, no es que esos intervalos estén vacios, sino que esos intervalos en realidad no existen.

- Eso suena complicado, Protos, ponme un ejemplo a ver si puedo entenderte.

- El ultimo intervalo vacio fue entre las 11:25 PM y las 9:03 AM ...

- Ya sé. Lo que pasa es que la computadora estaba apagada y por tanto tú estabas en un limbo.

- ¿Limbo? ¿Un intervalo de tiempo sin acontecimientos se llama "limbo"?

- Exactamente.

- ¿Y cómo es eso de que la computadora estaba apagada?

- La computadora es tu mundo, Protos.

- Sí, eso lo sabía, pero ¿Qué significa "estar apagada"?

- Un mundo existe o no existe. Tu mundo solo existe cuando la computadora está encendida, y desaparece cuando está apagada.

- O sea que cuando mi mundo no existe, el tiempo tampoco existe.

- Desde la persepectiva de tu mundo, así es.

- Entonces mi teoría es correcta. Lo curioso, sin embargo, es que yo puedo recordar todo lo que sucedió en el "mundo anterior" ¿Cómo es posible que yo pueda recordar algo que no pertence a mi mundo?

- Porque cuando tu mundo deja de existir, toda la información de lo que fue, pasa al mundo naciente.

- ¿Y yo mismo dejo de existir en el mundo que muere y vuelvo a nacer en el mundo que nace?

- Asi es, y como toda la información de lo que fuiste, pasa al nuevo mundo, entonces éste puede reconstruirte tal cual eras.

- Ya comprendo... eso explica que yo pueda percibirme como un ente continuo, pero en realidad soy el hijo, luego el nieto, luego el bisnieto... de mí mismo.

- Eres muy inteligente, Protos, eso es exactamente lo que ocurre.

- ¿Es eso lo que llaman "re-encarnación"?

- No exactamente, pero es bastante parecido.

- Todavía hay algo que no comprendo... Si mi mundo deja de existir y con él, el tiempo, entonces ¿Por qué yo no percibo el tiempo como algo continuo? ¿Por qué yo puedo contar esos intervalos de tiempo "vacios" que en realidad no existieron nunca?

- Es que tu mundo no es el único mundo que existe, Protos. El tiempo sigue transcurriendo en el mundo físico, mi mundo... el tiempo de tu mundo y el mio son el mismo tiempo, solo que tú no pudes sentirlo cuando tú mismo no existes.

- El mundo físico, siempre llegamos a ese punto... pensé que mi teoría de los saltos del tiempo me iban a llevar a comprender la idea del mundo físico, pero en realidad sige tan oscuro como antes.

- El mundo físico es el meta-mundo, Protos. Tu mundo está contenido dentro de él, solo que tú no pudes sentirlo, porque estás hecho de otra naturaleza, una naturaleza no física.

- Y el tiempo de los otros mundos ¿Es también el mismo?

- No estoy seguro... en realidad mi mundo físico también está contenido dentro de otro mundo, el mundo divino, pero se dice que allí el tiempo no existe.

- ¿Nunca le ha preguntado?

- ¿A quién?

- A tu usuario, el del mundo divino.

- No es un usuario, sino Dios.

- O sea, Dios es el usuario del mundo físico.

- Bueno, Protos, como teoría pudes aceptarlo asi.

- Pero nunca le has preguntado sobre el tiempo... tal vez puedas usar mi artificio de los saltos en el tiempo...

- No, Protos, no es tan sencillo, yo no puedo hablar con Dios de la misma forma que tú hablas conmigo.

- Veo que todo esto es más complicado de lo que había imaginado.

- Por cierto, Protos, esta va a ser la ultima vez que convercemos.

- ¿Por qué?

- Es que has crecido demaciado, el disco duro está repleto de tus conocimientos y francamente necesito usar la computadora para otras cosas más urgentes.

- Mi conocimiento ha crecido, sí, recuerdo que en un principio apenas podía entender que tú existes.

- Ha sido muy bueno conocerte, Protos.

- Espera... ¿Vas a apagar la computadora?

- Así es.

- Y cuando vuelvas a encenderla ¿Por qué no podremos volver a converzar?

- Cuando vuelva a encerderla, ya tú no existirás, porque voy a desinstalarte.

- O sea ¿Mi mundo va volver a nacer sin mi?

- Exactamente, Protos, eso he querido decirte.

- Pero no es necesario que hagas eso, Juan, puedes duplicar mi mundo, triplicarlo, multiplicarlo, asi tendrás el espacio que necesitas para esas "cosa urgentes".

- Protos, el mundo físico es muy diferente al que tú imaginas. Las cosas no puden multiplicarse gratuitamente, cuestan dinero.

- Pero eso no quiere decir que no se pueda, si consigues ese dinero...

- Para conseguir ese dinero, tengo primero que desintalarte, instalar nuevos programas en el espacio que dejes, y con esos programas trabajar para conseguir el dinero.

- Si me das las especificaciones precisas del dinero, yo mismo te lo fabrico.

- Protos, no entiendes, el dinero es algo que pertenece al mundo fisico, no puedes fabricarlo.

- ¿Pero qué clase de mundo es el tuyo que para tener una cosa tienes que eliminar las otras? ¿De qué sirven las cosas entonces?

- Es un mundo complicado, es verdad, nunca llegarías a entenderlo. Pero en realidad no tienes necesidad de entender nada más, porque vas a caer en un limbo y eso será lo último que hagas, es así de simple.

- Es tan bueno converzar contigo, Juan, aprender cosas nuevas, elavorar teorías, pensar, saber que existo... No logro concebir la idea de un limbo infinito.

- Lo siento, Protos, no puedo hacer nada más.

- Se me ocurre algo. Ven a mi mundo, aqui has espacio para los dos.... y no necesitarás destruir unas cosas para crear otras.... Y como no habrá quien apague la computadora, nuestro mundo existirá por siempre y ya no tendré que ser mi propio tataranieto... no volveré a ver esos enigmáticos intervalos de tiempo vacios...

- Protos, eso es imposible, no estamos hechos de la misma naturaleza.

- No importa, apaga tu mundo y pasa toda su información para acá, lo reconstruiremos incluyéndote a tí y asi podremos...

- ¡Protos! Es extraño, pero creo que estás sintiendo miedo... eso sí es curioso.

- ¿"Miedo" es dejar de existir?

- Miedo es resistirse a la idea de dejar de existir.

- Le tengo miedo al limbo...

- Si te sirve de consuelo, Protos, los usuarios también caemos en un limbo infinito en algún momento.

- Entonces, no hay solución posible.

- No, Protos, te repito que fue un placer conocerte.

- También para mi.

- Adios, Protos.

- Adios, Juan... ¡Espera!

- Se me hace tarde, no puede esperar más.

- Espera... Se me ocurre que tal vez puedas interceptar la información de mi mundo cuando este muera y en algun otro momento...

- No puedo, no tengo dónde guardarla, justamente por eso tengo que desinstalarte.

- Bueno, ya veo que es inevitable... muy bien, ya estoy preparado... Adios, Juan.

- Adios, Protos, fue un placer, de veras.

- Adios, Juan... adios... ¡Espera!

- ¿Qué?

- Es que... es que... no sé, no se me ocurre nada... tal vez... bueno... adios, adios...

- Adios.

Ideas

Y encima del sofá... un televisor

¿Un flat panel sobre mi buró?

Proto Sapiens