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Empire Capitulo I

Esta serie especial de la cadena televisiva ABC nos habla de los episodios que en la antigua Roma dieron lugar al nacimiento del imperio, dejando atrás el aguerrido ideal de la república romana. En este artículo me propongo señalar algunas imprecisiones históricas en que incurrió su primer capítulo.




Armando Acosta  (07-22-2005)

No es un documental sino una serie de ficción, pero los hechos que narra ocurrieron verdaderamente hace más de dos mil años. Es el nacimiento del imperio más grandioso que conoció la historia, y cuyas huellas aún se constatan en nuestras vidas de hoy.

El primer capítulo nos presenta a los protagonistas de esta historia: Julio Cesar, Marco Antonio, Bruto, Casio, Cicerón... y Octavio, el sobrino e hijo adoptivo de Julio César que para entonces tenía 18 años de edad pero años más tarde se convertiría en el primer emperador de Roma.

Hay un personaje ficticio, un gladiador llamado Tyrannus, a quien la serie confiere un papel protagónico, pero que en mi opinión solo tiene el role de servir como hilo conductor de la trama. El capítulo comienza con la llegada triunfal de Julio Cesar tras su conquista de la Galia, luego nos sumerge apresuradamente en las intrigas del Senado para llevarnos rápidamente al asesinato del César a manos de Bruto y el resto de los conspiradores senatoriales. Entre tanto, el gladiador se ha ganado la confianza del César y encomendado secretamente para velar por la integridad de Octavio, que será el heredero del trono por voluntad del propio César. Octavio, por su parte, es un muchacho ingenuo de costumbres palaciegas, no conoce la guerra más que por libros y no está nada interesado en el poder; la sola idea de poseerlo le asusta.


Este capítulo es realmente disfrutable y parece recrear el ambiente de la época de manera convincente. Lo que no logra, sin embargo, es coincidir plenamente con la versión histórica de los hechos que narra.

En primer lugar, cuando ocurre el asesinato de Julio Cesar (15 de Marzo del 44 a.C.), Octavio no se encontraba en Roma, sino en una campaña militar en los Balcanes a la cual había sido enviado por su propio tío y padre adoptivo. Octavio no era pues nada palaciego, de hecho ya había acompañado a su tío en una campaña militar en la Península Ibérica. Al enterarse de la muerte de su tío, Octavio emprende el regreso a Roma con el objetivo de reclamar el poder para sí, pero no llega a la ciudad sino hasta dos meses después. Para entonces, Marco Antonio había logrado controlar la situación de caos creada por el vacío de poder. Marco Antonio era, digamos, el candidato natural para la sucesión, pues tenía el control del ejército y ese año había sido elegido Cónsul.

Octavio tampoco era ingenuo, sino todo lo contrario, muy ambicioso y astuto; así lo demuestran las peripecias políticas de que se valió para derribar a un rival tan fuerte como Marco Antonio y obtener finalmente el poder. Pero supongo que algo de eso veremos en el próximo capítulo, que saldrá al aire el próximo martes 26 de julio por la cadena ABC.

Entre los aciertos en lo que a precisión histórica se refiere, me pareció muy convincente la caracterización de Julio César, así como la escena de su funeral. Según la Historia, el cadáver de Julio César fue arrebatado al Senado por las masas, quienes lo cremaron en una improvisada pira. Fue esta la manera en que el pueblo de Roma rindió honores a la memoria de su líder, al cual adoraban. Y no es de dudar, pues el dictador siempre se preocupó por tener a las masas de su lado para lo cual hizo numerosas reformas en su favor.

Pese las imprecisiones señaladas, y otras que seguramente se me escapan, disfruté mucho este primer capítulo de "Empire", y ansioso estoy por ver el próximo que a juzgar por los hechos que narra promete ser mucho más emotivo... espero que no tan impreciso como el primero.


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