Memorial Day

Hoy es lunes 29 de mayo, las oficinas cierran, la televisión transmite programas especiales, los norteamericanos se concentran en recordar a sus héroes caídos en combate: es "memorial day".

Yo, que no soy norteamericano (aunque vivo en este país desde hace mucho), me entretenía viendo un documental grabado en DVD, sobre la historia de Roma; francamente me había olvidado de esta fecha patria; pero de pronto me acordé y me puse a ver la televisión; lo que vi, me hizo pensar.

Toda guerra lejana en el tiempo tiene ese sabor a gloria y a leyenda que nos hace sentir cómodos, como esas conquistas de los romanos sobre el mundo "barbárico", o aquella de los cristianos -siglos después- sobre los "infieles", o incluso una tan reciente como la segunda guerra mundial. Pero hoy la televisión norteamericana trata de glorificar una guerra que aún permanece en curso, la de Irak. Mi juicio como espectador se impone, es algo demasiado contemporáneo para ser perdonado o tolerado por mí.

Hay historias fabulosas, actos valientes, sacrificio, voluntad... ¿pero puede a mí conmoverme la valentía de un soldado que va a invadir un país extranjero a cambio de un bono para estudios universitarios? ¿Puedo sentir yo piedad de un soldado que está allí por su propio deseo, sin nada ni nadie que lo haya forzado a arrojarse al peligro? ¿Podría justificar al soldado, si no he justificado de antemano a la guerra misma?

Mucha gente aquí en Estados Unidos exhiben en sus autos una etiqueta que dice "Support our troops" (apoyamos a nuestras tropas) .

Mi respuesta a esos carteles es esta: "I do not suport the troops, because I don't support the war at all".

Comprendo que es un tema delicado, especialmente en un día como hoy; pero viendo el documental de Roma y constrastándolo con las imágenes de Irak, tengo que concluir que la guerra es, o debería ser, una cosas del pasado.