Justicia, misericordia, paz.

Parto del principio de la relatividad de los conceptos; especialmente del de justicia; en la biblia se maneja mucho el concepto de “justicia”; no considerandose esta la que se imparte en nuestros juzgados, sino la atenencia a las leyes de Dios, mirado de esa forma la justicia (de Dios, repito) siempre ha mirado y mirará desde los cielos, Dios es incuestionablemente justo en el concepto de la religión que lo recrea.

Y lo de justicia esta ligado al concepto de verdad, cualquiera que sea la ley que nos juzgue (cada cual será juzgado por su Ley, dice también El Libro); y si es la humana con más razón, se supone que tratemos en primera instancia de dilucidar la verdad de los hechos antes de juzgar a alguien… Mas, me pregunto, en presencia de un hecho considerado delito o pecado… ¿a la luz de qué que justicia es este condenable o redimible?… quizás a la luz de la misma justicia que los consideró como tal, los clasificó bajo su moral o código ético devenido en ley para dar un caracter obligatorio al cumplimiento de estas normas.

Podemos revisar algunas de estas normas: los judios apedreaban a las mujeres infieles… ¿no es tambien condenable el matar asi de salvajemente a alguien por muy abominable que sea su falta?... en algunos paises musulmanes aún se le corta las manos a los ladrones… y en el mundo occidental no somos menos brutales: condenamos a muerte a nuestros semejantes… y no estoy hablando de la silla electrica o la inyección letal… estoy hablando de emplear armas de exterminio masivo, de promover guerras como ha sucedido lamentablemente en nuestros tiempos tan “civilizados” con un senido de justicia bastante cuestionable,

En mi opinión más que encontrar una "justicia" acomodaticia a todos viendo lo infructuoso de tal cosa a pesar de que en un sentido todas estas cosas son una misma cosa en manos de quienes tienen el sartén tomado por el mango lo realmente necesario y urgente es un encuentro entre la misericordia y la verdad para que esta última esté condicionada por la primera; nuestra verdad sería tener misericordia de nuestros supuestos enemigos y hasta de nosotros como especie, pues nos espera un futuro miserable por el camino que se lleva… este encuentro entre misericordia y verdad generaría la paz, la comprensión de que no debemos luchar el uno contra los otros…

La paz creo que todos más o menos tenemos una idea común; aún los mas intranquilos pueden entender que la paz se relaciona con la tranquilidad… quienes promueven la beligerancia en nombre de una paz futura o arguyendo estarse defendiendo o escudándose en los manidos conceptos de libertad y democracia para ser más directo, están ciegos pensando en sus inmediatas ganancias (de cualquier tipo que sea) y son dignos de lástima en su miseria de espíritu, esa lástima no cambiará en nada el rumbo de las cosas, las malas cosas que están pasando en este “tiempo de guerra” el cual ojalá que, como péndulo salomónico, genere un “tiempo de paz” y entonces podamos ser dignos de esa mirada justa desde los cielos.