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He creado este espacio para compartirlo con familiares y amigos, aunque no descarto la posibilidad de que otros visitantes se encuntren a gusto y lo puedan disfrutar tambien...

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Y encima del sofá... un televisor

¿Realmente merece el televisor ese papel protagónico que solemos darle?


¿Un flat panel sobre mi buró?

¿Y por qué no... "debajo" del buró?


Encuentro en la playa, Llaima y compañia

Llaima había convocado un "beach party" en Broward para este sábado (ver anuncio), la convocatoria incluía a un gran número de amigos y la jornada se concebía prolongable hasta la mismísima noche.




Armando Acosta  (08-18-2003)

Sábado, Agosto 16 de 2003

Lamentablemente, nuestro reportero llegó un poco tarde tras perderse unas cuantas veces en las pintorescas calles de Hollywood, de modo que no podemos contar con imagenes de los autobuses de turismo procedentes de Miami, la playa invadida por los centenares de amigos, las postas con carteles de "Welcome" para guiar a los arribantes... todo eso me lo contaron a mi llegada y como tal, lo reporto. De lo que sí fui testigo fue de una plácida jornada entre pocos pero buenos camaradas dispuestos a pasarla bien. La lista es tan breve que tomará dos lineas apenas, pero nos divertimos tanto que temo no poder recogerlo en este reportaje. Llaima, su mamá Magda, su compañero Christian, Yisell con su novio Anthony, mi mamá (Clipsia) y yo.


Antes de la playa en sí, hay un parque con mesas y bancos rústicos a la sombra de árboles frondosos llenos de hormigas, sestos para desperdicios, hornillas para cocinar al carbón, yerba, espacio y paz. El primer evento de la jornada fue una parrillada ofrecida por Christian que, argentino al fin, es experto en carnes... oportuno añadir que su compañera Llaima se ha vuelto experta en "chimuchurri", ese complemento de la carne tan indispensable para los argentinos.

Yisell y Anthony llegaron despues, el reportero les bienvino con una eufórica avalancha de fotos de las cuales ninguna sirvió, por eso no las incluyo.

La mesa sirvió de marco para un multílogo intenso (diálogo es entre dos, multílogo, entre muchos) en que se discutieron detalles sobre el próximo cine debate (ver reportaje del primer cine debate).


Después de la comida, vino el mar... o sea, el mar no vino, nosotros fuimos a él. Yisell ardía en deseos de meterse en el agua pero prefirió complacer a Anthony quedándose en la arena. Llaima, por el contrario, se despojó de su pequeño short antes de lanzarse hacia las olas, y por alguna razón que no me ha sido explicada, el fotógrafo volvió a lanzarse eufórico al ataque, con tan mala suerte que esas fotos tampoco resultaron aptas para esta publicación.

El agua tenía la temperatura exacta, pero estaba extremadamente sucia; tal vez esta fue la razón que indujo a la mayoría a permanecer en la arena, comodamente instalados sobre toallas semejantes a alfombras májicas, un sol tenue y buena gente que no nos quemaba, la brisa complaciente, el olor inconfundible del mar, su rugido amistoso, las algas muertas adornando la arena, el momento perfecto de paz y relajación que un fumador ilustrado como Anthony elige para prender un tabaco... en efecto, eso hizo. Yo tambien me animé a participar del rito, juntos fumamos sendos tabacos, solo que el mio me produjo una congestión inusual en el pecho cuya causa solo supe despues: "A diferencia del cigarro, el tabaco no se inhala hasta los pulmones, el humo no debe pasar de la boca" - Now you tell me... imagínense que a un aprendiz de natación subacuática no le adviertan que cuando se está allá abajo, hay que aguantar la respiración.

El mejor momento fue el juego de las películas, para lo cual nos dividimos en dos bandos, los hombres y las mujeres. El título ganador por inadivinables fue "Pulp Fiction"... En cuanto a los concursantes, los hombres (por supuesto) resultaron ganadores.


Hay que dar una mensión especial a las proviciones aportadas por Clipsia, jugos de frutas, café caliente y uvas naturales servidas sobre el hielo de un pequeño cooler depositado sobre la arena. Tambien hay que hacer constar que no se ingirieron bebidas alcoholicas, demostrándose una vez más que se puede pasar un rato muy agradable y divertido sin necesidad de enagenarse. La enagenación es solo para aquellos que no saben disfrutar la vida, tal cual es.


(Estoy preparando un fotoreportaje con muuuuchas fotos... esten pendientes).


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